Las amasadoras son ideales para mezclar mortero. Estas se pueden utilizar colocando el mortero sobre una especie de depósito o bandeja de metal y luego se empieza a amasar el material. De ahí su nombre.
Las amasadoras son ideales para mezclar mortero. Estas se pueden utilizar colocando el mortero sobre una especie de depósito o bandeja de metal y luego se empieza a amasar el material. De ahí su nombre.
Esta varilla es multiusos y su principal característica es la impulsión del material con que se está trabajando. Tiene hélices anchas, potentes y de buena calidad que se introducen en el material, lo mezclan muy bien y queda listo para ser usado. Con él se puede trabajar en diversos materiales ya sean viscosos o adherentes. Están indicados para ser usados con cemento de cola, cemento de mortero rápido, cemento para azulejos, mortero adhesivo, enlucido, masillas epoxi, revoque, masillas tapagrietas, cemento para piso cerámico, etc.
Este accesorio de la construcción es una especie de batidora para cementos de todos tipo, inclusive los adhesivos. Es la “batidora” del albañil, maestro de obra, del arquitecto e ingeniero, inclusive para toda aquella persona que se aventura a realizar las reparaciones de casa para no contratar a alguien especializado.
Este instrumento es tan fácil de usar que, basta un depósito de goma o bandeja de metal para mezclar ya sea el cemento de mortero, macilla o adhesivo y mezclarlo para que posteriormente sea utilizado. El amasador le facilita el trabajo al obrero o constructor porque en muchas ocasiones esa mezcla se solía hacer con paletas con las que se aplica el mortero.
Pero hoy, con el amasador es más fácil el trabajo, se avanza más y se ahorra tiempo. Lo principal, las partículas que se mezcla quedan perfectas, al aplicarlas al poco tiempo no se caerán o dañará. A veces, el no mezclar bien las partículas de los diferentes cementos hace que con los días el trabajo quede mal, que las paredes luzcan con grietas.